Hace tres años hice un curso de canto en hebreo,
un curso buenísimo. La chica que lo daba- una israelí- era cantante de opera barroca, directora de
orquesta y maestra de Reiki . En ese curso conocí a personas muy interesantes como Laura Alai,
quien después me presentaría a Alberto
Sáiz y Francis Lumbreras( que luego descubrimos q éramos paisanos y que
teníamos amigos comunes... a Francis lo podéis ver entre mis contactos)…Alberto
es un canal muy potente y Francis trabaja con la música…
Como decía, el curso fue una
gozada, pero ¡¡difícil de narices!!, complicadísimo para hacerlo yo sola por mi
cuenta….empecé a darle vueltas, cuando vino a mi mente una persona a la que yo
había conocido años atrás…L.….nada hacía presagiar todo lo que se aproximaba a
mi vida…
La llamé por teléfono y le
dije que tenía algo que quería que escuchara…nos vimos en Callao y tomamos un
café. Ella -clavecinista barroca y catedrática en la Universidad de Pedagogía
musical- enseguida me dijo que mucha
gente le pasaba mucha música, alumnos, personas que estaban haciendo la tesis doctorales, compañeros,
amigos, etc y que tenía poco tiempo y no sabía cuando la podría escuchar…esa
misma tarde me estaba llamando para decirme que “ hacía años que no escuchaba
algo tan bello”…entonces fue cuando le dije..” y tu crees, que podríamos
cantarlo?” y ella, con esa actitud , tan suya y maravillosa de “fuera límites,
fuera expectativas, juguemos, exploremos, a ver a dónde llegamos”, porque “no
buscamos ningún premio-¿ verdad?- ni
nada parecido…hagámoslo, a ver qué pasa”….así fue como empecé a estudiar música
y a cantar con ella….
…Al principio yo estaba un
poco agarrotada- demasiado estrés ligado a mi mundo profesional- y no conseguía fluir todo lo que quería,
entonces fue cuando empezó a ponerme los
vídeos de Bobby Mcferrin, para que me impregnara de su espontaneidad.
También hicimos trabalenguas disociativos
musicales- jajaja, ¿recuerdas?- y muchas otras cosas que
fuimos experimentando y que todas nos iban llevando a otras y a un desarrollo mayor de mi
contacto con el mundo musical…pasé a otro estado de conciencia musical , a un estado más ligero y vibracional, en ese momento le enviaba dos o tres canciones diarias que yo quería aprender a cantar, le hacía propuestas a las que para mi asombro ella nunca decía que no......aprendí solfeo, mientras ella sacaba las partituras , había que cambiar la letras de las canciones que estaban en inglés en su mayoría...empecé a hacer letras de canciones, un día me encontré con la flauta en una canción de Camel y empecé a tocarla , luego llegó un segundo instrumento y luego un tercero…llegamos a tocar juntas dos instrumentos, ella piano y yo flauta o al revés...en fín, ¡una gran gozada en la
que aún vivo!…
Y así comenzó todo y así es
que conocí al gran McFerrin, negro guapísimo
, brillante y con una sonrisa maravillosa…
Por cierto, que fue uno de
los músicos que me encontré en Eletrilandia…
Aquí se acompaña de Richard
Bona, que tampoco se queda atrás…
Mi eterno agradecimiento para L. que, por cierto, es una de mis más fieles seguidoras en el blog.
Un abrazo musical,
Anllels
No hay comentarios:
Publicar un comentario