NUESTRAS ALMAS FUERON LIMPIADAS
Ni yo misma sospechaba la que se me venía encima, cuando en mayo
presenté mi libro en Madrid y, posteriormente, me examinaba de guitarra y lenguaje musical de
2º curso, en sendas actuaciones en las que me gané el notable, en el mes de junio. Menos mal que el aluvión de
trabajo comenzó a mediados de junio y pude hacer lo anterior, porque si no....
Llevo desde mediados d junio trabajando diez horas diarias
en mi puesto de trabajo, a una intensidad y velocidad que, no me permite detenerme a comer o desayunar. Es lo que hay.
Mis jefes me ofrecieron cambiar de puesto, hacer más visible mi trabajo y mis
capacidades. Y ahí estamos, pues los comienzos hasta que todo se diseña , se
tramita, se gestiona y se ejecuta, se lleva su buen tiempo...incluyendo muchos
de mis sábados y hasta alguna parte del domingo. Para que luego digan que los
funcionarios no trabajan...en todas partes hay de todo.
El día 25 de julio, gracias a Dios, levantada desde las seis
de la mañana para rematar unas tareas, me voy a las nueve al retiro a darme un
paseo...hace tiempo que no subo. Al llegar al Paseo de Carruajes, de pronto, la energía más limpia de la que habitualmente
me rodea me produce una sensación semejante a la fruición, al goce...la
claridad de la Luz, más clara de la habitual , me llena y abre mis ojos de par en par...ahí
mis ojos comienzan a llorar, mientras en el cielo se dibuja el Skyline que
forman los árboles al tocarlo...Tengo un salto en el tiempo y me veo en
Prashanti Nilayam, el hogar de Sai Baba, al que fuí varias veces y recuerdo
como nuestras lágrimas brotaban nada más llegar
sin que nosotros -en aquél momento- supiéramos el por qué... En aquel tiempo, no sabíamos que nuestra alma se estaba
limpiando y que las lágrimas indicaban ese brotar inefable de lo profundo...Y era verano...
Nota:
Ya sabéis que Google+ , no me pone los +1, pero eso ya no importa...Gracias a los que estáis ahí siempre. Nos vemos la semana que viene...